París, 26 ene (PL) Decenas de miles de franceses desfilaron hoy en esta capital y en diversas ciudades del país como parte de la protestas de los chalecos amarillos, mientras en esta capital comienzan a agruparse para asistir a la «noche amarilla».
Por onceno sábado consecutivo multitudes de ciudadanos se manifestaron por todo el territorio nacional para mostrar la vigencia de la movilización, que reclama una mayor justicia social y fiscal.
Aunque el origen de la protesta a finales de 2018 fue el aumento de precios del combustible decretado por el Ejecutivo, luego las reivindicaciones se ampliaron al aumento de impuestos en general y la pérdida del poder adquisitivo como resultado de la política gubernamental.
Los chalecos amarillos ahora reclaman también reformar la Constitución en aras de una democracia plena y que los ciudadanos tengan la posibilidad de pedir e impulsar la realización de referendos nacionales sobre temas relevantes.
En la jornada se registraron algunos enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad, principalmente en esta capital y en la urbe de Evreux (norte).
Para las próximas horas está prevista una «noche amarilla» convocada por Éric Drouet, uno de los líderes del movimiento, dirigida a reforzar las demandas ante el gobierno de Emmanuel Macron.
Cientos de personas comenzaron ya a agruparse en la plaza de la República para estar presentes en la nueva iniciativa.
«Las próximas semanas se anuncian relativamente duras para Francia» porque la movilización se va a intensificar y los chalecos amarillos «pueden manifestarse en todos lados, en cualquier momento, en el día, la noche, el fin de semana, la semana», explicó Drouet.
En esta primera «noche amarilla», el objetivo es tener un gran punto de encuentro y debate entre las personas, similar a lo ocurrido en el movimiento «Noche en pie», que se desarrolló en la primavera de 2016.
Noticias internacionales: En libertad exasesor de Trump relacionado con pesquisa en elecciones